La Zona Arqueológica de Tlatelolco del Instituto Nacional de Antropología Mexicana acoge una exposición temporal que muestra la importancia que tuvieron los objetos de molienda en la práctica cotidiana del antiguo México en el ámbito alimenticio.
El uso de utensilios como el metate o el molcajete era imperativo en la preparación de los alimentos, desde las tortillas de maíz -sustento básico- hasta las salsas que aderezan cualquier comida. Platillos como la vasta variedad de moles de la cocina mexicana actual se componen de una infinidad de ingredientes molidos.
La exposición muestra restos de estos instrumentos localizados en diferentes contextos arqueológicos así como ilustraciones de los cronistas del siglo XVI, com el Códice Florentino. Estos utensilios han sobrevivido al paso del tiempo y hasta hace poco formaban parte de los enseres domésticos.
Análisis químicos realizados en fragmentos de cerámica nos permiten saber que sus funciones también se han mantenido, pues en los molcajetes antiguos se han encontrado restos que indican la molienda de productos blandos y especias como los chiles y jitomates, sabores fundamentales en la cocina y los manjares de hoy.
El título de la exposición así lo refleja: "Moles, manjares y metates, Molienda mexica-tlatelolca". La muestra puede visitarse hasta el mes de septiembre, con entrada libre.
