El chef austríaco Heinz Reitbauer, con dos estrellas Michelin en su restaurante Steirereck, situado en el puesto número nueve en la lista The World´s 50 Best en 2016, ha sido el protagonista de las últimas cenas organizadas por el club privado Estudio Millésime, ubicado en el Hotel St. Regis.
El chef ofreció su "cocina de vanguardia austríaca enraizada en el paisaje" en cuatro cenas con las que conquistó a los comensales pero aprovechó también su estancia para realizar visitas imprescindibles para cualquier gourmet. El cocinero cenó en Pujol donde pudo probar el mole madre de Enrique Olvera. “Me ha sorprendido ese mole tan intenso, tan extraño para mis costumbres, bestial, racial”, dijo el chef, y en Biko, donde recibió como obsequio un vino del año en que nació, 1970.
Heinz Reitbauer también probó la comida del templo de la cocina tradicional El Bajío de Titita Ramírez que organizó un menú con platillos como gorditas de frijol, tacos de cochinita, carnitas, costillas y rabo de toro en diferentes moles, tosta de pato encurtido, de pata, margarita clásica, de mango con mezcal… Casi se saltaban las lágrimas de los tres centroeuropeos emocionados ante el sabor.
Además, el chef visitó el mercado de La Merced. “Queremos conocer la gastronomía mexicana desde sus raíces“, pidió el chef. Allí compró kilos de mole en polvo y pasta, chiles de todo tipo, maíces y quelites. Además, manifestó su intención de investigar sobre el epazote que tratará de cultivar en el huerto de Steirereck.
El chef anfitrión de Estudio Millésime es el madrileño Óscar Portal, quien llegó a México aproximadamente hace un año, y ha recibido a figuras de la gastronomía mundial comoNacho Manzano, Mitsuharu Tsumura, Joan Roca, Martín Berasategui, Carlos Gaytán, Virgilio Martínez o René Redzepi. La próxima visita, de agosto al 1 de septiembre, será la de Ricardo Sanz.