El mango, fruto del árbol homónimo, posee una carne anaranjada y muy jugosa. Es originario de Malasia y llegó a África y América del Sur alrededor del siglo XVI.
Aunque en Asia y las Antillas es común consumirlo cocido (como entremés o guarnición), su degustación también puede ser en crudo o a través de sorbetes, confituras, mermeladas y jaleas. Muy popular es también el Chutney que aúna sabores dulces y salados y que en la gastronomía india adereza carnes, arroces o incluso queso.
En España, Canarias ha sido el lugar de cultivo del mango desde que en el siglo XVIII se importara desde Filipinas. Sin embargo, algunas fincas andaluzas están empezando a producirlo y venderlo directamente al consumidor a través de Internet. Un ejemplo de ello es la empresa Mangos del Cielo, que cultiva tres clases (Irwin, Osteen y Keitt) a un precio que no supera los 30€ por cada caja de 4 kilos.
Apunte Nutricional: Además de gozar de valores diuréticos y laxantes y ser muy bajo en grasa, alrededor de 60 Kcal por cada 100 gramos, el mango tiene un alto contenido en hierro, potasio, provitamina A y vitaminas C y B.
