Una campaña de ICA Latinoamérica, "Cobre, esencial para el mundo sustentable" nos recuerda en estos días la importancia de la ingesta de alimentos que aporten este mineral, un elemento fundamental para la producción de energía en el cuerpo
Entre los alimentos más ricos en cobre podemos destacar los mariscos, huevos, algunas semillas, legumbres, cereales integrales, las setas, papas, el chocolate, por el alto contenido de cobre del cacao, y, sobre todo, las nueces, el alimento de mayor contenido de cobre por cada100 gramos.
La cantidad recomendada de este mineral, según la Organización Mundial de la salud (OMS), es de 12,5 miligramos al día por quilogramos de peso en adultos y de 50 miligramos al día por quilogramos de peso en niños. Eso significa que un adulto con 70 quilogramos debe ingerir en torno a los 0,88 miligramos de cobre por día.
Aunque en condiciones habituales de alimentación, el aporte nutricional de cobre es suficiente, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) enfatiza que el cobre es necesario para el ser humano. Este mineral previene la anemia y enfermedades óseas, detiene el daño celular, mejora la calidad de los tejidos y la piel, ayuda a la cicatrización, participa en la síntesis de algunas hormonas como la insulina y niveles adecuados de colesterol.