San Pedro Atocpan celebra desde el pasado 3 de octubre su tradicional Feria Nacional del Mole, un salsa que se ha convertido en uno de las recetas más representativas de México y que se consume frecuentemente en celebraciones y festivales desde el periodo colonial español.
Más de la mitad del mole consumido en el país se produce en el pueblo rural de San Pedro Atocpan, en las afueras de la ciudad de México. Fue en 1977, en el marco de las festividades del Señor de Yencuitlalpan y por iniciativa de un grupo de vecinos emprendedores, cuando se realizó por primera vez esta feria que hoy es toda una tradición en Atocpan y que en la última edición congregó a unas 600.000 personas en tres semanas.
Este año, los visitantes pueden escoger entre 40 restaurantes típicos que ofrecen mole rojo con pollo, pipián con carne de cerdo y chilacayotes, conejo en adobo y la especialidad el mole almendrado con guajolote, o adquirir su presentación de pasta o granulado para llevar a casa en los que ofertan los diferentes tipos de mole, el rojo, el verde, el almendrado, entre otros.